Asunto: Re: casa VIII
Hola Sausan:
Hay tres casas ocultas en la carta natal: la IV, la VIII y la XII, que corresponden a los tres signos de agua,
,
y
respectivamente.
La esencia de cada una de esas casas es distinta porque una de ellas tiene una energía distinta, derivada de su posición relativa en el círculo: la casa IV corresponde al verano (solsticio de verano) y tiene la premisa de la "maduración" de los frutos, es decir de la maduración de nosotros mismos. Es como la culminación interior o inconsciente. Es oculta porque pertenece al reino de del "ser" personal. No hay manifestación, porque no hace falta. Es más bien una construcción interior. Y en ese interior se engloba o agrupan todas las sensaciones, deseos más íntimos, lo que nos hace sentirnos protegidos, los recuerdos... en la casa IV llevamos a nuestra madre interior, nuestra casa interior, nuestra alma... es la parte más baja de la carta, y también la parte más personal.
La casa IV se corresponde con el hogar en relación biunívoca, es decir: dime cómo es tu hogar y te diré como está tu casa IV, o al revés, dime como es tu casa IV y te diré cómo es tu hogar. El hogar físico es el reflejo del alma. Y, así como nuestro hogar físico es un lugar de intimidad y recogimiento, de protección, así también nuestra casa IV es un lugar de secretos y de ocultación. O al menos, de restricción al ámbito de lo más familiar, de lo más conocido. De la
protección.
La casa IV nos transmite valores y otros efectos personales a través de la herencia.
La casa VIII es un área que corresponde con
y como tal funciona en ella, como has dicho, la esencia del misterio y el sexo. Es oculta porque es la casa en la que compartimos secretos con los otros, bien de tipo sexual o de tipo económico. Pero la casa VIII tiene un significado más profundo que eso. Al ser casa de
, lo que contiene la casa VIII solo es accesible mediante profundas búsquedas, no exentas de dolor. Para entrar en la casa VIII hay que hacerlo con riesgo de no volver a salir, hay que bajar a los infiernos. En la casa VIII nos vamos a encontrar con nuestro Minotauro personal, porque la casa VIII es el Laberinto de nuestra alma y en ella guardamos aquellas cosas que nos dan
miedo.
En la casa VIII se esconden los tabúes de todo tipo que, bien por cultura o por educación, no podemos sacar fácilmente con los demás. Son todos los tabúes que existen en relación con los demás: la muerte, el sexo, el dinero...
La casa XII corresponde al signo de
. Es el final del círculo y por tanto el final del recorrido, en el que nos sumergimos en la indiferenciación total.
La casa XII nos transmite valores y otras cosas a través de la herencia genética, más lejana que la de la casa IV, pero quizás más importante. Su origen se pierde en la noche de los tiempos y hace referencia a la biología. Los planetas presentes en la casa XII pueden hacer referencia a "vidas anteriores" o, dicho de otro modo, a factores que son pura herencia genética, procedentes de nuestros ancestros, cuyo funcionamiento no controlamos en absoluto. En ella está el misterio de la creación y de la muerte, de la pertenencia al todo y de la diferenciación como seres únicos.
La "no limitación" de la casa XII se refiere a que lo que hay en ella pertenece a la especie, o al reino animal, o a todo... y por eso es una casa misteriosa, porque es la menos concreta. Un planeta mal aspectado en esta casa provocará problemas difíciles de reconocer y de concretar, y habrá que buscar su explicación en raíces genéticas, de comportamiento animal, instintivo, y su curación vendrá por una comprensión o iluminación.
Espero haberte solucionado la duda.
Saludos.
Antonio González Estévez
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